Cuatro hábitos saludables que deberías incorporar a tu rutina

¿Qué es un hábito saludable? Hemos oído muchas veces hablar sobre las ventajas de llevar una vida saludable, pero la realidad es que a veces no sabemos bien de qué se trata lo saludable. Podemos inferir que tiene que ver con una alimentación correcta y actividad física regular.

Alimentarse de forma balanceada con alimentos naturales y evitar los productos ultra procesados es tan solo una de las recomendaciones. Asimismo, practicar deportes o cualquier ejercicio físico que nos agrade por al menos 30 minutos por día fortalece nuestros músculos y huesos y nos ayuda controlar la tensión arterial, los niveles de glucosa, entre otros beneficios.

Sin embargo, existen otros factores que nos conducen hacia una vida saludable. En esta ocasión vamos a repasar solo algunas de las muchas costumbres diarias que nos permitirán conectarnos con una vida plena y en armonía con el universo… es decir, saludable. Aunque puedes practicar estos consejos a cualquier hora del día, es durante la mañana el momento en que planificamos y nos predisponemos a vivir un nuevo día de la mejor manera. 

1. Amanece temprano

Levantarse temprano nos permite aprovechar el día al máximo. Pero, recuerda que debes acostarte también temprano la noche anterior, de lo contrario madrugar será un tremendo sacrificio en lugar de una experiencia satisfactoria.

2. Organiza tu mañana

Olvídate de levantarte de la cama de un salto y hacer todas tus actividades a las apuradas porque nada bueno viene luego de un despertar caótico. Es preferible poner el despertador unos minutos antes para amanecer con calma.

Al abrir los ojos, di algo positivo como “hoy es un día estupendo”, “hoy cumplo mis objetivos”, entre otros. Repítelos en presente y no en futuro varias veces más durante el día. Respira profundamente y llena de aire los pulmones, siéntete viva o vivo. Estira tu cuerpo lo más que puedas y toma una ducha siempre que sea posible.

Lo ideal es beber un par de vasos de agua antes de desayunar. Estarás aportando una muy buena hidratación que favorece el funcionamiento de los riñones y la oxigenación de las células. Y ahora sí estás en condiciones de tomarte un buen desayuno.

3. Di gracias

Luego de la afirmación positiva, di gracias: “gracias por una nueva oportunidad y por el nuevo sol”. Agradecer nos conecta con todo lo positivo que tenemos en la vida porque nos hace caer en la cuenta de que podría no estar allí, y sin embargo está. Un hogar, seres queridos, alimentos, trabajo, etc. A cada rato y por cada nueva experiencia, agradece y nunca des nada por sentado.

4. Haz una lista

Este es uno de los puntos más importantes. Cada noche debes dedicar unos minutos a confeccionar una lista con las actividades del día siguiente. De esta manera liberas tu memoria de tener que recordar detalles, fechas y demás actividades que bien puedes dejar por escrito. Por otro lado, incluye en esa lista de tareas aquella que vienes postergando por diversos motivos y realízala en primer lugar. Verás cómo todo comienza a fluir con más naturalidad.

Esperamos que puedas aplicar algunos de estos consejos. La idea es que los adaptes a tu circunstancia personal y puedas adquirir hábitos más saludables que devengan en una vida más ordenada y equilibrada.