Cómo usar los aceites esenciales: todo lo que tienes que saber
Creemos que los aceites esenciales son esas de esas joyitas que nos regala la madre naturaleza que todos deberíamos probar, pues te aseguramos que son un pasaje solo de ida. En esta oportunidad queremos compartir contigo por qué se utilizan, cuáles son las formas en que puedes usarlos y qué precauciones debes tener en cuenta.
Por qué le decimos sí a los aceites esenciales
Estos aceites, además de ser esenciales, son naturales. Esto quiere decir que se extraen de plantas y hierbas de las cuales se aprovechan las propiedades innatas de estas que pueden ser curativas, estimulantes, calmantes, entre otras. En este sentido, queremos hacer hincapié en que siempre elijas aceites naturales que no contengan agregados de otro tipo.
Los aceites esenciales nos devuelven el equilibrio natural que debe existir entre el cuerpo y la mente y que por diferentes causas muchas veces perdemos. Y por su esto fuera poco, también se utilizan en diferentes productos cosméticos para el cuidado nuestra salud y belleza.
Tres formas de usar aceites esenciales
Podemos incorporar los aceites esenciales a nuestro cuerpo principalmente de tres formas diferentes. Todo dependerá del tipo de aceite y del uso que queramos darle.
1. Vía oral
Es quizás la menos frecuente. Se presentan en comprimidos y sí o sí deben estar indicados por una profesional de la salud. Los más nombrados son los Omegas 3, 6 y 9.
2. Vía cutánea
Los aceites esenciales contienen cantidades generosas de vitaminas y ácidos grasos insaturados. Estas sustancias aportan nutrición e hidratación a nuestra piel. Debido a la textura liviana de este tipo de aceites, sus compuestos penetran en la dermis y la epidermis y dejan la piel suave y tersa en el acto. Una de las formas de usarlos en la piel es a través de cosméticos que contengan aceites esenciales en sus fórmulas.
Por ejemplo, si los aplicas sobre el rostro, retardan el proceso de desgaste de las células. Solo un masaje diario con unas gotas de un determinado aceite esencial bastará para devolverle a tu piel la flexibilidad y la iluminación que se van perdiendo con los años.
En el caso del cabello, los aceites esenciales relajan el cuero cabelludo y le confiere fuerza e hidratación.
IMPORTANTE. El aceite de lavanda, manzanilla y árbol de té son los únicos que pueden aplicarse sobre la piel de forma directa. El resto necesitarán de un aceite conductor como el de almendras o jojoba.
3. Vía respiratoria
Se trata de la reconocida aromaterapia que se basa en la utilización de aceites esenciales para aplicar masajes cuyo efecto relajante y descontracturante se potencia con el uso de estos aceites. Al inhalar su aroma, nos conectamos de otra forma con las emociones y recuerdos que nos generan determinadas fragancias. Puedes optar por difusores especiales para aceites esenciales y aprovechar así al máximo sus cualidades.
Precauciones
Siempre sugerimos que consultes con una especialista en la materia, pero a grandes rasgos estas son algunas de las precauciones que debes tener.
- Aceites esenciales cítricos. Son fotosensibles, es decir que no deberías exponer la piel al sol luego de haberlos usado porque podrían quedarte manchas. Su uso se recomienda en invierno.
- Alergias. Si eres una persona alérgica, siempre consulta con tu dermatóloga antes de aplicar un aceite esencial sobre tu piel.
- El aceite de lavanda, manzanilla o árbol de té no están indicados para personas con problemas cardiovasculares.
- No los aplique sobre la piel sin previa consulta a una profesional.
Con toda esta información esperemos que comiences muy pronto a disfrutar de todos los beneficios de los aceites esenciales.
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